Las conecciones ilegales detectadas suman 630 millones de pesos, equivalentes al consumo promedio de 20.000 hogares.
Las inpecciones se realizaron en zonas comerciales e industriales de Rosario, Santa Fé y Rafaela. Se supervisaron más de 22.000 suministros en el bimestre agosto-septiembre. Sólo en Rosario, la tasa de detección de irregularidades supera el 40%.
La EPE continúa con los operativos de detección de irregularidades con el objetivo de reducir el hurto de energía, en el marco del Plan de Disminución de Pérdidas No Técnicas. Cabe destacar qué en los ultimos 9 meses, con la nueva gestión provincial conducida por el Gobernador Maximiliano Pullaro y el Ministro de desarrollo Productivo Gustavo Puchini (cuya órbita pertenece la EPE), los operativos de detección se incrementaron notablemente. «Lo más importante es que la tasa de eficacia está creciendo: en 2022, fue de 13% y hoy estamos llegando al 20%. Estamos convencidos qué, para tener una empresa más eficiente, hay que aumentar los controles porque la energía qué alguien consume y no paga, perjudica al usuario, qué sí paga su factura», destacó Puccini.
«Los operativos se enfocan en detectar conexiones clandestinas y robo de energía, lo que representa una perdida significativa tanto para la empresa como para los usuarios», destacó el presidente de la EPE, Hugo Marcucci.
También enfatizó, «Los santafesinos deben comprender que cada peso producto de fraude, es dinero que pagamos todos los santafesinos».
«Vamos actuar con mucha firmeza frente aquellos que roban a los ciudadanos, ésta gestión, no sólo tiene el compromiso de hacer más eficiente el funcionamiento y los recursos de la empresa sino también de rendir cuentas, investigar hasta las últimas consecuencias y erradicar los circuitos ilegales instalados que tanto daño provocan» concluyo.