Ayelén fue vista por última vez el lunes por la noche en Rosario. Días después, su madre recibió una llamada extorsiva desde un número con característica de México, donde le exigieron tres millones de pesos para no asesinar a su hija. La policía investiga el hecho.
Ayelén, de 16 años, está desaparecida desde el lunes por la noche, cuando fue vista por última vez en el barrio Mangrullo de la ciudad de Rosario. Su madre denunció el hecho ante la comisaría 15ª y el caso tomó un giro más alarmante el jueves, cuando recibió un llamado extorsivo desde un número con característica internacional.
Según su relato, los extorsionadores le exigieron tres millones de pesos a cambio de la vida de su hija y le advirtieron que, en caso de no pagar, matarían a la menor. La mujer pidió una prueba de vida, pero la llamada se cortó y no volvió a tener contacto con los delincuentes.
Una cita con un joven conocido por redes sociales
De acuerdo con lo declarado por una amiga de la adolescente, Ayelén había acordado encontrarse con un joven que había conocido a través de redes sociales. La noche de su desaparición, la joven caminaba con su hermana de 14 años rumbo a la casa de una tía, pero en el trayecto decidió separarse para concretar el encuentro.
Desde ese momento no se supo nada más de ella. La familia indicó que ella no contaba con teléfono celular propio y utilizaba los de sus allegados para comunicarse, lo que dificulta el rastreo de sus últimos movimientos.
Investigación policial en curso
Las autoridades se encuentran trabajando en la búsqueda de la menor, recabando testimonios y analizando las comunicaciones previas a la desaparición. Por el momento no se han difundido novedades oficiales, aunque se presume que se está trabajando bajo un posible caso de trata o secuestro extorsivo.
El hecho generó conmoción en la zona sur de Rosario. Vecinos del barrio Mangrullo cortaron Circunvalación (Acceso Sur) y Avenida del Rosario en señal de protesta, exigiendo avances concretos en la investigación.
Llamado extorsivo y su origen internacional
Uno de los aspectos más inquietantes del caso es la llamada extorsiva recibida por la madre, que provino de un número con característica telefónica de México. No se descarta que haya una conexión con redes criminales transnacionales o bien que se trate de un intento de estafa que se aprovechó de la situación.
Sin embargo, el hecho de que Ayelén continúe desaparecida mantiene viva la preocupación por su seguridad. La familia insiste en que el contacto telefónico debe ser tomado con seriedad, ya que se realizó en un contexto de incertidumbre absoluta sobre el paradero de la joven.
La familia de Ayelén difundió su imagen y pidió la colaboración de la comunidad para aportar cualquier dato que pueda ayudar a encontrarla. Quienes tengan información pueden comunicarse con la comisaría más cercana o al 911.
El caso se suma a otros hechos recientes que exponen los riesgos del uso de redes sociales por parte de menores de edad sin supervisión adulta, así como la creciente preocupación por la seguridad en entornos urbanos donde la trata y la extorsión siguen siendo amenazas latentes.