Azorada, pero en definitiva no sorprende, ya nos había mentido mucho, en pandemia, nos encerró, pero en Olivos se festejaba el cumpleaños de » mi querida Fabiola», primero dijo que la foto eran falsas, el estaba en la foto, luego dijo que no sabía nada, y le echó la culpa a ella, pagó la multa con «la nuestra», pero la señora que estaba tomando sol en el parque, y quién nadaba preparándose para competir, casi van presos, estábamos tan amenazados, que había mucho miedo de salir, los periodistas con un pase del medio en el que trabajábamos podíamos hacerlo «de la casa al trabajo y del trabajo.a la casa» (les suena), mientras veíamos las toneladas de multas que se le hacían a los vehículos, cuándo no se los llevaba la grúa, y desde lejos podíamos enterarnos de cómo se morían amigos qué no podíamos despedir, nos cambió la vida, perdimos nuestros miniemprendimientos, la posibilidad de ver a nuestros seres queridos, solo nos invadía la tristeza, el dolor, y muchos casos, la soledad.
Este hombre nos mintió siempre, pero lo votaron por tener cara de bueno (volvemos distintos), la expresidente, se cansó de humillarlo, públicamente, sin piedad, (así es el comportamiento), silencio del expresidente, ante estos actos, (parece ficción), no, lo vivimos, víctima y victimario, eso es Alberto Fernández, tremendo, se nos estruja el corazón de dolor.
La verdad, es muy difícil escribir esta nota, porque siempre hemos sufrido violencia de género, a veces no física, pero si verbalmente, e intelectualmente, aquellos que la ejercen a través del poder, físico, superioridad laboral, y el dinero, hay muchas formas más, estas las más comunes, las que.presenciamos a diario, repugnantes, a pesar de ello seguimos conviviendo. Cómo comprobar la violencia verbal, hiere profundamente, generalmente se muestran cómo personas simpáticas, en realidad son monstruos, no se denuncian, porque no hay esperanza de castigo, triste.
Mientras tanto, nos preguntamos qué hacer, y las respuestas son infinitas, pero ninguna certeza, abogados que se hacen los tontos, y todo depende del dinero, si sos pobre económicamente, que te maten, sino hay plata ,no hay defensor, la víctima queda olvidada, solo sabremos de los que tuvieron cobertura mediática.
(Noticia, en desarrollo)
